Hispaniæ: textus hispanicus, callæcus, catalaunicus et vasconicus pro memoria beatæ Mariæ Virginis Ecclesiæ Matris, feria II post Pentecosten

culto-divino-membrete

Prot. N. 28 / 19

HISPANIÆ

Textus hispanicus, callæcus, catalaunicus et vasconicus
Missæ atque Liturgiæ Horarum pro memoria
beatæ Mariæ Virginis, Matris Ecclesiæ,
feria secunda post Pentecosten

Probatum.

Ex ædibus Congregationis de Culto Divino et Disciplina Sacramentorum, die 12 mensis septembris 2019, in memoria sanctissimi Nominis Mariæ.

roche-firma
✠ Arturus Roche
Archiepiscopus a Secretis

 


Añadido a los libros litúrgicos del Rito Romano:
memoria de la bienaventurada Virgen María, Madre de la Iglesia

EN EL CALENDARIO ROMANO GENERAL

JUNIO

Lunes después de Pentecostés
Bienaventurada Virgen María, Madre de la Iglesia          Memoria

EN EL MISAL ROMANO

Lunes después de Pentecostés

Bienaventurada Virgen María, Madre de la Iglesia

Memoria

De la Misa votiva de la bienaventurada Virgen María, Madre de la Iglesia (p. 1078).

EN EL LECCIONARIO

Lunes después de Pentecostés

Bienaventurada Virgen María, Madre de la Iglesia

PRIMERA LECTURA (opción 1)          Gén 3, 9-15. 20

La madre de todos los que viven

Lectura del libro del Génesis.

Después de comer Adán del árbol, el Señor Dios lo llamó y le dijo:

«¿Dónde estás?».

Él contestó:

«Oí tu ruido en el jardín, me dio miedo, porque estaba desnudo, y me escondí».

El Señor Dios le replicó:

«¿Quién te informó de que estabas desnudo?, ¿es que has comido del árbol del que te prohibí comer?».

Adán respondió:

«La mujer que me diste como compañera me ofreció del fruto y comí».

El Señor Dios dijo a la mujer:

«¿Qué has hecho?».

La mujer respondió:

«La serpiente me sedujo y comí».

El Señor Dios dijo a la serpiente:

«Por haber hecho eso, maldita tú entre todo el ganado y todas las fieras del campo; te arrastrarás sobre el vientre y comerás polvo toda tu vida; pongo hostilidad entre ti y la mujer, entre tu descendencia y su descendencia; esta te aplastará la cabeza cuando tú la hieras en el talón».

Adán llamó a su mujer Eva, por ser la madre de todos los que viven.

Palabra de Dios.

PRIMERA LECTURA (opción 2)          Hch 1, 12-14

Perseveraban en la oración junto con María, la madre de Jesús

Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles.

Después de que Jesús fue levantado al cielo, los apóstoles volvieron a Jerusalén, desde el monte que llaman de los Olivos, que dista de Jerusalén lo que se permite caminar en sábado. Cuando llegaron, subieron a la sala superior, donde se alojaban: Pedro y Juan y Santiago y Andrés, Felipe y Tomás, Bartolomé y Mateo, Santiago el de Alfeo y Simón el Zelotes y Judas el de Santiago.

Todos ellos perseveraban unánimes en la oración, junto con algunas mujeres y María, la madre de Jesús, y con sus hermanos.

Palabra de Dios.

Salmo responsorial          Sal 86, 1-2. 3 y 5. 6-7

R/.    Qué pregón tan glorioso para ti,
ciudad de Dios.

V/.   Él la ha cimentado sobre el monte santo;
y el Señor prefiere las puertas de Sion
a todas las moradas de Jacob.   R/.

V/.   ¡Qué pregón tan glorioso para ti,
ciudad de Dios!
Se dirá de Sion: «Uno por uno,
todos han nacido en ella;
el Altísimo en persona la ha fundado».  R/.

V/.   El Señor escribirá en el registro de los pueblos:
«Este ha nacido allí».
Y cantarán mientras danzan:
«Todas mis fuentes están en ti».  R/.

Aleluya

Oh, feliz Virgen que engendraste al Señor;
oh, santa Madre de la Iglesia,
que infundes en nosotros el Espíritu de tu Hijo Jesucristo.

EVANGELIO          Jn 19, 25-34

Ahí tienes a tu hijo. Ahí tienes a tu madre

Lectura del santo Evangelio según san Juan.

En aquel tiempo, junto a la cruz de Jesús estaban su madre, la hermana de su madre, María, la de Cleofás, y María, la Magdalena.

Jesús, al ver a su madre y junto a ella al discípulo al que amaba, dijo a su madre:

«Mujer, ahí tienes a tu hijo».

Luego, dijo al discípulo:

«Ahí tienes a tu madre».

Y desde aquella hora, el discípulo la recibió como algo propio.

Después de esto, sabiendo Jesús que ya todo estaba cumplido, para que se cumpliera la Escritura, dijo:

«Tengo sed».

Había allí un jarro lleno de vinagre. Y, sujetando una esponja empapada en vinagre a una caña de hisopo, se la acercaron a la boca. Jesús, cuando tomó el vinagre, dijo:

«Está cumplido».

E inclinando la cabeza, entregó el espíritu.

Los judíos entonces, como era el día de la Preparación, para que no se quedaran los cuerpos en la cruz el sábado, porque aquel sábado era un día grande, pidieron a Pilato que les quebraran las piernas y que los quitaran. Fueron los soldados, le quebraron las piernas al primero y luego al otro que habían crucificado con él; pero al llegar a Jesús, viendo que ya había muerto, no le quebraron las piernas, sino que uno de los soldados, con la lanza, le traspasó el costado, y al punto salió sangre y agua.

Palabra del Señor.

EN LA LITURGIA DE LAS HORAS

Lunes después de Pentecostés

Bienaventurada Virgen María, Madre de la Iglesia

Memoria

La bienaventurada Virgen María recibe el título de Madre de la Iglesia, puesto que ella ha engendrado a Cristo, Cabeza de la Iglesia y en la redención fue proclamada Madre antes de que el Hijo en la cruz entregara su espíritu. El papa san Pablo VI confirmó solemnemente este título en la alocución a los Padres del Concilio Vaticano II, el día 21 de noviembre de 1964 y estableció que «de ahora en adelante sea honrada e invocada por todo el pueblo cristiano con este gratísimo título, la Madre de Dios».

Del Común de santa María Virgen, excepto lo siguiente:

Oficio de lectura

HIMNO

Oh, Virgen Madre,
feliz hija de tu Hijo,
la más sublime y humilde
entre todas las criaturas.

Tú, escogida desde la eternidad
en el designio divino;
tú, la mayor gloria y belleza
de la humana naturaleza.

La que tan excelsa mostraste
que su altísimo Creador,
se hizo en ella, por ti,
admirablemente creado.

En el seno virginal
renació el amor ardiente
a cuyo calor germinan
en la tierra las flores del cielo.

Gloria sea dada al Padre y al Paráclito
y al Nacido de ti,
que te han llamado a ser
la santa Madre de la Iglesia.

SEGUNDA LECTURA

De la alocución del papa san Pablo sexto, en la clausura de la tercera etapa del Concilio Vaticano segundo.

(21 de noviembre de 1964: AAS 56 [1964], 1015-1016)

María Madre de la Iglesia

Para gloria de la Virgen y consuelo nuestro, Nos proclamamos a María Santísima Madre de la Iglesia, es decir, Madre de todo el pueblo de Dios, tanto de los fieles como de los pastores que la llaman Madre amorosa, y queremos que de ahora en adelante sea honrada e invocada por todo el pueblo cristiano con este gratísimo título.

Se trata de un título, venerables hermanos, que no es nuevo para la piedad de los cristianos; antes bien, con este nombre de Madre, y con preferencia a cualquier otro, los fieles y la Iglesia entera acostumbran a dirigirse a María. En verdad pertenece a la esencia genuina de la devoción a María, encontrando su justificación en la dignidad misma de la Madre del Verbo Encarnado.

La divina maternidad es el fundamento de su especial relación con Cristo y de su presencia en la economía de la salvación operada por Cristo, y también constituye el fundamento principal de las relaciones de María con la Iglesia, por ser Madre de Aquel, que desde el primer instante de la encarnación en su seno virginal se constituyó en cabeza de su Cuerpo místico, que es la Iglesia. María, pues, como Madre de Cristo, es Madre también de los fieles y de todos los pastores, es decir, de la Iglesia.

Con ánimo lleno de confianza y amor filial elevamos a ella la mirada, a pesar de nuestra indignidad y flaqueza; ella, que nos dio con Cristo la fuente de la gracia, no dejará de socorrer a la Iglesia, que, floreciendo, ahora en la abundancia de los dones del Espíritu Santo, se empeña con nuevos ánimos en su misión de salvación.

Nuestra confianza se aviva y confirma más considerando los vínculos estrechos que ligan al género humano con nuestra Madre celestial. A pesar de la riqueza maravillosa en prerrogativas con que Dios la ha honrado, para hacerla digna Madre del Verbo encarnado, está muy próxima a nosotros. Hija de Adán, como nosotros, y, por tanto, hermana nuestra con los lazos de la naturaleza, es, sin embargo, una criatura preservada del pecado original en virtud de los méritos de Cristo, y que a los privilegios obtenidos suma la virtud personal de una fe total y ejemplar, mereciendo el elogio evangélico «Bienaventurada porque has creído». En su vida terrena realizó la perfecta figura del discípulo de Cristo, espejo de todas las virtudes, y encarnó las bienaventuranzas evangélicas proclamadas por Cristo. Por lo cual, toda la Iglesia, en su incomparable variedad de vida y de obras, encuentra en ella la más auténtica forma de la perfecta imitación de Cristo.

RESPONSORIO          Cf. Lc 1, 35

R/. El Espíritu Santo vino sobre María: * La fuerza del Altísimo la cubrió con su sombra.

V/. Ella fue asociada a la pasión de su Hijo, que la vivió como Madre del redentor: * La fuerza del Altísimo.

La oración como en Laudes.

Laudes

HIMNO

Oh, Virgen, resplandeciente estrella
de caridad para los santos
y manantial vivo y fecundo de esperanza
para nosotros, los mortales.

Tanto vales, gran Señora,
ante el piadoso corazón de tu Hijo,
que quien pide con confianza,
por ti, segura lo alcanza.

La ayuda de tu bondad
no solo auxilia al que te implora,
sino que con gusto das
y el deseo de los suplicantes colmas.

En ti la misericordia,
en ti la grandeza;
tú contienes la bondad
que las criaturas poseen.

Gloria sea dada al Padre y al Paráclito
y al Nacido de ti,
que te han llamado a ser
la santa Madre de la Iglesia.

Benedictus, ant. Los discípulos perseveraban unánimes en la oración, con María, la Madre de Jesús.

Oración

Oh, Dios, Padre de misericordia, cuyo Unigénito, clavado en la cruz, proclamó a santa María Virgen, su Madre, como Madre también nuestra, concédenos, por su cooperación amorosa, que tu Iglesia, cada día más fecunda, se llene de gozo por la santidad de sus hijos y atraiga a su seno a todas las familias de los pueblos. Por nuestro Señor Jesucristo.

Vísperas

HIMNO

Oh, Virgen, Madre de la Iglesia,
eterna puerta de la gloria,
sé nuestro refugio
ante el Padre y el Hijo.

Gloriosa Madre de Dios,
que has engendrado al Creador,
ruega por todos nosotros
que celebramos tu fiesta.

Estrella de los mares, luz refulgente,
de linaje real, santa Madre,
ruega al Padre y al Hijo
para que nos den el Paráclito.

Virgen clemente, Virgen fiel,
dulce Virgen María,
escucha las oraciones de todos
los que con devoción te suplican.

Presenta las oraciones a tu Hijo,
despreciado, maltratado, flagelado
por las espinas herido,
y por nosotros crucificado.

Madre que da vida al gran Rey,
luz y puerta de los altos cielos,
acércate a los pobres
que con lágrimas te pedimos.

Gloria sea dada al Padre y al Paráclito
y al Nacido de ti,
que te han llamado a ser
la santa Madre de la Iglesia.

O bien: Ave, Maris stella.

Magníficat, ant. Dijo el Señor a su Madre: Mujer, ahí tienes a tu hijo; también dijo al discípulo: ahí tienes a tu Madre.

Oración como en Laudes.

EN EL MARTIROLOGIO ROMANO

Se debe añadir entre los elogios para celebraciones móviles:

10bis. Lunes después de Pentecostés

Memoria de la bienaventurada Virgen María, Madre de la Iglesia, a quien Cristo encomendó sus discípulo para que perseverando en oración al Espíritu Santo, cooperaran en el anuncio del Evangelio.

Adicións aos libros litúrxicos do Rito Romano
memoria da Benaventurada Virxe María, Nai da Igrexa

NO CALENDARIO ROMANO XERAL

XUÑO

Luns despois de Pentecoste
Benaventurada Virxe María, Nai da Igrexa.          Memoria

NO MISAL ROMANO

Luns despois de Pentecoste

Benaventurada Virxe María, Nai da Igrexa.

Memoria

De misa votiva da benaventurada Virxe María, Nai da Igrexa.

NO MISAL ROMANO

Luns despois de Pentecoste

Benaventurada Virxe María, Nai da Igrexa

Memoria

Antífona de entrada Feit, 1-14

Os discípulos perseveraban unánimes na oración con María, a Nai de Xesús.

Oración colecta

Deus Pai de misericordia, cuxo Unixénito, cravado na cruz,
proclamou a Santa María Virxe, súa Nai,
tamén como Nai nosa,
concédenos, pola súa amorosa cooperación,
exulte pola santidade dos seus fillos
e atraia ao seu seo a todas as familias dos pobos.
Polo noso Señor Xesús Cristo, teu Fillo,
que vive e reina contigo na unidade do Espíritu Santo, Deus por sempre
eternamente.

Oración sobre as ofrendas

Acepta, Señor, as nosas ofrendas,
e convérteas en sacramento de salvación
que nos inflame no amor da Virxe María,
Nai da Igrexa,
e nos asocie máis estraitamente, con ela,
na obra da salvación dos homes.
Por Xesús Cristo, noso Señor.

PREFACIO III DE SANTA MARÍA VIRXE

MARÍA, MODELO E NAI DA IGREXA

59 (B). Este prefacio dise nas misas da benaventurada Virxe.

V. O Señor sexa convosco
R. E contigo tamén.

V. Erguede os corazóns.
R. Témolos postos no Señor.

V. Deámoslle grazas ao Señor, noso Deus.
R. É digno e de xustiza.

Verdadeiramente é digno e de xustiza,
é o noso deber e salvación
darche grazas sempre e en todo lugar, Señor, Pai santo,
Deus todopoderoso e eterno,
e tributarche a nosa humilde loanza
nesta celebración en honor da Virxe María.

Ela recibiendo o teu Verbo cun corazón inmaculado,
mereceu concibilo no seu seo virxinal
e, dando a luz ó Señor,
preparou o nacemento da Igrexa.

Ela, ao recibir ao pé da cruz o testamento do teu amor divino,
tomou coma fillos a todos os homes,
nados á vida sobrenatural
pola morte de Cristo.

Ela, esperando cos apóstolos a vinda do Espíritu,
unindo a súa oración á dos discípulos
converteuse en modelo da Igrexa suplicante.

Ela, despois da súa ascensión ao ceo,
coida con amor de nai á Igrexa peregrina pola terra,
guiando os seus pasos cara á patria celestial
ata que chegue o día glorioso do Señor.

Por iso, cos anxos e cos santos,
loámoste, dicindo sen cesar:

Santo, Santo, Santo…

Antífona de comunión          Cf. Xn 19,26-27

Desde a cruz,
Cristo díxolle ao discípulo amado: «Aí tes a túa nai».

Oración despois da comuñón

Despois de recibir esta prenda de redención e de vida
suplicámosche, Señor, que a túa Igrexa,
pola intercesión maternal da benaventurada Virxe,
intrúa a tódalas nacións, anunciándolles o Evanxeo,
e encha o mundo enteiro coa efusión do teu Espíritu.
Por Xesús Cristo, noso Señor.

NO LECCIONARIO

PRIMEIRA LECTURA

Nai de todos os que viven

Lectura do libro da Xénese         3,9-15.20

Despois de que o home comeu da árbore, o Señor Deus chamou por el, preguntándolle:

-«Onde estás?»

El respondeulle:

-«Oínte no xardín e, como me vin espido, tiven medo e agacheime».

Preguntoulle o Señor Deus:

-«Quen te informou de que estabas espido? É que comiches da árbore da que che prohibira comer?»

Respondeulle Adán:

-«A muller que me deches por compañeira, ela ofreceume do froito, e comín».

O Señor díxolle á muller:

-«Que é o que fixeches?»

E a muller respondeu:

-«A serpe enganoume, e comín».

Entón o Señor Deus díxolle á serpe:

-«Porque fixeches isto, maldita sexas entre os animais e as feras todas do monte. Andarás arrastrada e comerás po toda a túa vida. Poño hostilidade entre ti e a muller, entre a túa liñaxe e a súa liñaxe; esta esmagarache a cabeza e ti tentarás atinxirlle o calcañar».

O home chamou Eva á súa muller, pois vén ser a nai de todos os que viven.

Palabra do Señor.

Ou.

Dedicábanse conxuntamente á oración, con María, a nai de Xesús

Lecuta do libro dos Feitos dos apóstolos          1, 12-14

Despois de que Xesús ascendeu ao ceo, os apóstolos volveron para Xerusalén desde o chamado Monte das Oliveiras, que está preto de Xerusalén: distante o camiño que se pode facer en sábado.

Despois de que chegaron, subiron ao cuarto de arriba, onde residían Pedro, Xoán, Santiago, Andrés, Filipe, Tomé, Bartolomeu, Mateu, Santiago o de Alfeo, Simón o Zelota e Xudas o de Santiago.

E todos eles dedicábanse conxuntamente á oración, con algunhas mulleres e mais María, a nai de Xesús, e cos seus irmáns.

Palabra do Señor.

Salmo responsorial          Sal 86 (87), 1-2.3 e5.6-7

R/ Cousas gloriosas se teñen dito de ti, Cidade de Deus.

Os seus alicerces están no monte santo:
O Señor ama as portas de Sión
máis que todas as moradas de Xacob.

Gloriosas cousas se din de ti, cidade de Deus.
De Sión hase dicir:
Un por un naceron todos nela
e fundouna o mesmo Altísimo.

 O Señor escribirá no rexistro dos pobos:
«Este naceu alí».
E cantarán danzando:
«As miñas fontes están todas en ti».

Aclamación ao Evanxeo

Aleluia, Aleluia.

Oh feliz Virxe, que enxendraches ao Señor;
Oh benaventurada nai da Igrexa,
que en nós alimentas o Espírito
do teu Fillo, Xesús Cristo.

Aleluia, aleluia.

EVANXEO

Velaí o teu fillo. Velaí a túa nai.

Lectura do santo Evanxeo segundo Xoán.          19, 25-35

Naquel tempo, ao pé da cruz de Xesús estaban súa nai e a irmá de súa nai, María a de Cleofás, e mais María a Madalena. Xesús, vendo a súa nai e, onda ela, o discípulo a quen amaba, díxolle á nai:

-«Muller, velaí o teu fillo».

Despois díxolle ó discípulo:

-«Velaí a túa nai».

Desde aquela hora o discípulo acolleuna con el.

Despois disto, sabendo Xesús que xa todo estaba rematado, para que se cumprise plenamente a Escritura, dixo:

-«Teño sede».

Había alí un xerro cheo de vinagre. Entón, atando unha esponxa empapada de vinagre a unha cana de hisopo, achegáronlla á boca.

Cando probou Xesús o vinagre dixo:

-«Está cumprido».

E, inclinando a cabeza, entregou o espírito.

Os xudeus entón, como era o Día da Preparación, para que non permanecesen os corpos na cruz durante o sábado -pois era grande aquel día de sábado-, rogáronlle a Pilato que lles rompesen as pernas e os retirasen.

Viñeron logo os soldados, e rompéronlle as pernas ao primeiro e mais ao outro que crucificaran con el. Pero ao chegaren onda Xesús, como o viron xa morto, non lle romperon as pernas, senón que un dos soldados lle traspasou o costado cunha lanza; e no instante saíu sangue e auga.

Palabra do Señor.

NA LITURXIA DAS HORAS

Luns despois de Pentecoste

BENAVENTURADA VIRXE MARÍA, NAI DA IGREXA

Memoria

A benaventurada Virxe María recibe o título de Nai de Igrexa, xa que ela enxendrou a Cristo, Cabeza da Igrexa e na redención foi proclamada Nai antes de que o Fillo entregara o espírito na cruz. O papa san Paulo VI confirmau solemnemente este título na alocución aos Pais do Concilio Vaticano II, o día 21 de novembro de 1964 e estableceu que «de agora en diante sexa honrada e invocada por todo o pobo cristián con este gratísimo título a Nai de Deus».

Del Comín de santa María Virxe.

Oficio de Lecturas

O virgo mater, filia
tui beáta Fílii,
sublímis et humíllima
præ creatúris ómnibus.Divíni tui consílii
fixus ab ævo términus,
tu decus et fastígium
natúræ nostræ máximum:Quam sic prompsísti nóbilem,
ut summus eius cónditor
in ipsa per te fíeret
arte miránda cónditus.In útero virgíneo
amor revíxit ígneus,
cuius calóre gérminant
flores in terra cælici.Patri sit et Paráclito
tuóque Nato glória,
cuius vocáris múnere
mater beáta Ecclésiæ.
Oh Virxe nai venturosa
filla feliz do teu Fillo,
a máis sublime e humilde
entre todas as criaturas.
Ti escollida desde sempre
polo designio divino,
ti a maior gloria e beleza
da humana natureza:
Tan nobre a mostraches
que o Sumo Creador
fíxose por ti creado
con arte admirable.
No teu seo virxinal
renaceu o amor ardente
e coa súa calor xerminaban
na terra flores do ceo.
Gloria ao Pai, gloria ao Paracleto
e gloria ao Nado de ti,
por mor de quen te chamas
santa nai da Igrexa. Amén.

SEGUNDA LECTURA

Da alocución do papa san Paulo VI, na clausura da terceira etapa do Concilio Vaticano segundo.

(21 novembro 1964: AAS 56 [1964], 1015-1016)

María Nai da Igrexa

Para gloria da Virxe e consolo noso, Nós proclamamos a María Santísima Nai da Igrexa, é dicir, Nai de todo o pobo de Deus, tanto dos fieis como dos pastores, que a chaman Nai amorosa; e queremos que de agora en diante sexa honrada e invocada por todo o pobo cristián con este gratísimo título.

Trátase dun título, venerables irmáns, que non é novo para a piedade dos cristiáns; antes ben, con este nome de Nai, e con preferencia a calquera outro, os fieis e a Igrexa enteira acostuman dirixirse a María. En verdade pertence á esencia xenuína da devoción a María, atopando a súa xustificación na dignidade mesma da Nai do Verbo encarnado.

A divina maternidade é o fundamento da súa especial relación con Cristo e da súa presenza na economía da salvación operada por Cristo, e tamén constitúe o fundamente principal das realcións de María coa Igrexa, por ser Nai de Aquel que desde o primeiro instante da encarnación no seu seo virxinal, constituíuse en cabeza do seu Corpo místico, que é a Igrexa. María, pois, como Nai de Cristo, é Nai tamén dos fieis e de todos os pastores, é dicir, da Igrexa.

Con ánimo cheo de confianza e amor filial elevamos a ela a mirada, a pesares da nosa indignidade e fraqueza; ela, que nos deu con Cristo a fonte da graza, non deixará de socorrer á Igrexa que, florecendo agora na abundancia dos dons do Espírito Santo, empéñase con novos ánimos na súa misión de salvación.

A nosa confianza avívase e confírmase aínda máis ao considerar os estreitos vínculos que ligan ao xénero humano coa nosa Nai celestial. A pesares da riqueza marabillosa en prerrogativas coa que Deus a honrou, para facela digna Nai do Verbo encarnado, está moi próxima a nós. Filla de Adán, coma nós, e, polo tanto, irmá nosa cos lazos da natureza, é, con todo, unha criatura preservada do pecado orixinal en virtude dos mérritos de Cristo, e que aos privilexios obtidos suma a virtude persoal dunha fe total e exemplar, merecendo o eloxio evanxélico «Benaventurada porque criches». Na súa vida terrea realizou a perfecta figura do discípulo de Cristo, espello de todas as vitudes, e encarnou as benaventuranzas evanxélicas proclamadas por Cristo. Por isto, toda a Igrexa, na súa incoparable variedade de vida e de obras, atopa nela a máis auténtica forma da perfecta imitación de Cristo.

RESPONSORIO          Cf. Lc 1, 35

R/. O Espíritu Santo veu sobre María: * A forza do Altísimo cubriuna coa súa sombra.

V/. Ela foi asociada á paixón do seu Fillo, como Nai dos redimidos: * A forza do Altísimo cubriuna coa súa sombra.

A oración coma en Laudes

LAUDES

HIMNO

Quæ caritátis fúlgidum
es astrum, Virgo, súperis,
spei nobis mortálibus
fons vivax es et prófluus.Sic vales, celsa Dómina,
in Nati cor piíssimi,
ut qui fidénter póstulat,
per te secúrus ímpetret.Opem tua benígnitas
non solum fert poscéntibus,
sed et libénter sæpius
precántum vota prævenit.In te misericórdia,
in te magnificéntia;
tu bonitátis cúmulas
quicquid creáta póssident.Patri sit et Paráclito
tuóque Nato glória,
cuius vocáris múnere
mater beáta Ecclésiæ.
Oh Virxe, de caridade es estela
que luce para os santos no ceo,
fonte viva e abondosa de esperanza
para nós os mortais deste mundo.Tanto vales, excelsa Señora,
no corazón do teu piadoso fillo,
que podemos estar seguros de acadar
o que ante ti con confianza se pide.A túa bendade
non só axuda aos que imploran
senón que adoita a adianterse
aos desexos non pedidos.En ti a misericordia,
en ti a magnificencia,
ti contés toda a bondade
que as criaturas posúen.Gloria ao Pai, gloria ao Paracleto
e gloria ao Nado de ti,
por mor de quen te chamas
santa nai da Igrexa. Amén.

Benedictus ant. Todos eles dedicábanse constantemente á oración con algunhas mulleres a mais María a nai de Xesús.

Oración

Oh, Deus, Pai de misericordia, cuxo Unixénito, cravado na cruz, proclamou a Santa María Virxe, súa Nai, tamén como Nai nosa, concédenos, pola súa cooperación amorosa, que la túa Igrexa, cada día máis fecunda, énchase de gozo pola santidade dos seus fillos e atraia ao seu seo a todas as familias dos pobos. Polo noso Señor Xesús Cristo.

VÉSPERAS

Virgo, mater Ecclésiæ,
ætérna porta glóriæ,
esto nobis refúgium
apud Patrem et Fílium.Gloriósa Dei mater,
cuius Natus est ac pater,
ora pro nobis ómnibus,
qui memóriam ágimus.Stella maris, lux refúlgens,
stirps regális, sancta parens,
roga Patrem et Fílium
ut det nobis Paráclitum.Virgo clemens, virgo pia,
virgo dulcis, o María,
exáudi preces ómnium
ad te pie clamántium.Funde preces tuo Nato,
crucifíxo, vulnerátom
pro nobis et flagelláto,
spinis puncto, felle potáto.Alma mater summi regis,
lux et porta celsi cæli,
inclína te mmisérrimis
geméntibus cum lácrimis.

Patri sit et Paráclito
tuóque Nato glória,
cuius vocáris múnere
mater beáta Ecclésiæ.

Salve, Virxe, nai da Igrexa,
eterna porta da gloria,
sé ti o noso refuxio
dianto do Pai e do Fillo.Gloriosa nai de Deus,
de quen, sendo Fillo, é Pai,
roga, Señora, por nós
que a túa memoria lembramos.Estrela do mar fulxente,
estirpe real, santa nai,
pídelle ao Fillo e ao Pai
que nos dean o Paracleto.Virxe clemente e piadosa,
Oh doce Virxe María,
escoita ben as pregarias
dos que piadosos te invocan.Preséntalles as nosas preces
ao teu Fillo flaxelado,
espiñas, feridas, fel
e por nós crucificado.Santa nai do Rei supremo,
luz e porta do empíreo,
acude aos máis precisados
que entre bágoas suspiran.

Gloria ao Pai, gloria ao Paracleto
e gloria ao Nado de ti,
por mor de quen te chamas
santa nai da Igrexa. Amén.

Ou

Ave maris Stella,
Dei Mater alma,
atque semper Virgo,
felix caeli Porta.Sumens illud Ave
Gabriélis ore,
funda nos in pace,
mutans Hevae nomenSolve vincla reis,
profer lumen caecis:
mala nostra pelle,
bona cuncta posce.Monstra te esse matrem:
sumat per te preces,
Qui pro nobis natus
tulit esse tuus.Virgo singuláris,
inter omnes mitis,
nos culpas solútos,
mites fac et castos.Vitam praesta puram,
iter para tutum:
ut vidéntes Iesum
semper collaetémur.

Sit laus Deo Patri,
summo Christo decus,
Spirítui Sancto,
tribus honor unus. Amen.

Oh do mar estrela,
santa Nai de Deus,
Virxe pura sempre,
portiña do ceo.Ti que recibiches
do Arcanxo o saúdo,
danos paz, trocando
de Eva en Ave o alcuño.Ceiba aos que están presos
dálles luz aos cegos,
líbranos dos males
e de bens atéiganos.Móstrate nai nosa
diante do teu Fillo
que por nós nascendo
de ti nacer quixo.Virxe escolleita,
doce máis que todos,
fainos inocentes,
castos e xeitosos.Danos vida santa,
camiño derito
para aledarnos sempre
con Xesús no ceo.

Gloria a Deus Pai sexa,
Gloria a Xesús Cristo,
e a mesma loanza
teña o Santo Espírito. Amén.

Magníficat ant. Dixolle Xesús á súa nai: muller, velaí o teu fillo; despois díxole ao discípulo: velaí a túa nai.

A oración como en Laudes.

NO MARTIROLOXIO ROMANO

Débese engadir entre os eloxios para celebracións móbiles:

10bis. Luns despois de Pentecoste

Memoria da benaventurada Virxe María, Nai da Igrexa, a quen Cristo encomendou aos seus discípulos para que, perseverando na oración ao Espírito Santo, cooperasen no anuncio do Evanxeo.

Addicions als Llibres litúrgics del Ritu Romà
de la memòria de la Benaurada Verge Maria, Mare de l’Església

AL CALENDARI ROMÀ GENERAL

JUNY

Dilluns després de Pentecosta
Benaurada Verge Maria, Mare de l’Església          Memòria

AL MISSAL ROMÀ

Dilluns després de Pentecosta

Benaurada Verge Maria, Mare de l’Església

Memòria

Es diu la Missa de la benaurada Verge Maria, Mare de l’Església (p. 931).

A L’ORDENAMENT DEL LECCIONARI DE LA MISSA

Dilluns després de Pentecosta

572 bis     Benaurada Verge Maria, Mare de l’Església

Memòria

LECTURA PRIMERA

Lectura del llibre del Gènesi          3,9-15.20

Mare de tots els qui viuen

Després que l’home hagué menjat el fruit de l’arbre,
el Senyor-Déu el cridà i li digué:

«¿On ets?»

Ell li respongué:

«He sentit que us passejàveu pel jardí
i, com que vaig nu, he tingut por i m’he amagat».

Li digué el Senyor-Déu:

«¿Qui t’ha fet saber que anaves nu?
¿És que has menjat del fruit de l’arbre
que jo t’havia prohibit de menjar?»

L’home li digué:

«La dona que m’heu donat m’ha ofert el fruit d’aquell arbre,
i n’he menjat.»

El Senyor-Déu digué a la dona:

«¿Per què ho has fet, això?»

Ella li respongué:

«És que la serp m’ha enganyat.»

El  Senyor-Déu digué a la serp:

«Ja que has fet això, seràs la més maleïda
de totes les bèsties i de tots els animals feréstecs.
T’arrossegaràs sobre el ventre
i menjaràs pols tota la vida.
Faré que sigueu enemics tu i la dona,
i el teu llinatge i el d’ella.
Ell t’atacarà al cap, i tu l’atacaràs al taló».

L’home donà a la seva esposa el nom d’Eva,
perquè ella ha estat la mare de tots els qui viuen.

o bé:

Lectura dels Fets dels Apòstols          1,12-14

Tots, unànimement, assistien a les hores de pregària amb Maria, la mare de Jesús

Després de veure com Jesús era endut al cel,
els apòstols se’n tornaren a Jerusalem
des de la muntanya de les Oliveres,
que és vora mateix de Jerusalem,
a la distància que era permès de recórrer
durant el repòs del dissabte.
Entraren a la ciutat i pujaren a la sala on s’allotjaven.
Eren Pere, Joan, Jaume, Andreu,
Felip, Tomàs, Bartomeu, Mateu,
Jaume fill de d’Alfeu, Simó, el Zelador, i Judes fill de Jaume.
Tots, unànimement, assistien sens falta a les hores de pregària,
amb les dones,
amb Maria, la mare de Jesús, i els germans d’ell.

SALM RESPONSORIAL

El Senyor té el palau a la muntanya santa,
i estima més els portals de Sió
que totes les viles de Jacob.

R. S’han dit de tu, ciutat de Déu, oracles gloriosos.

S’han dit de tu, ciutat de Déu,
oracles gloriosos:
Diuen d’ella:
«És l’Altíssim mateix qui l’ha fundada;
aquest i aquell altre són fills de Sió.» R.

El Senyor va escrivint al registre dels pobles:
«Fill de Sió.»
I els cantors i els dansaires responen:
«De tu brollen totes les meves fonts!» R.

AL·LELUIA

Oh feliç, Verge Maria, que heu infantat el Senyor;
oh santa Mare de l’Església,
que manteniu viu en el vostre cor
l’Esperit del vostre Fill, Jesucrist.

EVANGELI

Lectura de l’evangeli segons sant Joan          19,25-34

Aquí tens el teu fill. Aquí tens la teva mare

En aquell tempos,
vora la creu de Jesús hi havia la seva mare
i la germana de la seva mare,
Maria, la dona de Cleofàs, i Maria Magdalena.
Jesús veié la seva mare i, al costat d’ella,
el deixeble que ell estimava, i digué a la mare:
«Dona, aquí tens el teu fill».
Després digué al deixeble:
«Aquí tens la teva mare».
I d’aleshores ençà el deixeble l’acollí a casa seva.

Després d’això, Jesús,
conscient que ja s’havia realitzat tot el que calia,
perquè s’acabés de complir el que anunciava l’Escriptura
digué:
«Tinc set».
Hi havia allà un gerro ple de vinagre.
Llavors cobriren la punta d’un manat d’hisop amb una esponja xopa de vinagre
i la hi acostaren als llavis.
Jesús, després de prendre el vinagre, digué:
«Tot s’ha complert».
Llavors inclinà el cap i lliurà l’esperit.

Era divendres,
i els jueus no volien que els cossos quedessin a les creus
durant el repòs del dissabte,
tant més que aquell dissabte era una diada solemníssima.
Per això demanaren a Pilat
que trenquessin les cames dels crucificats
i traguessin els cossos.
Els soldats hi anaren
i trencaren les cames del primer, i després,
de l’altre que havia estat crucificat amb Jesús.
Però quan arribaren a Jesús
i s’adonaren que ja era mort, no li trencaren les cames,
sinó que un dels soldats li donà una llançada al costat
i a l’instant en sortí sang i aigua.

A LA LITÚRGIA DE LES HORES

Dilluns després de Pentecosta

BENAURADA VERGE MARIA, MARE DE L’ESGLÉSIA

Memòria

A la benaurada Verge Maria se li ha atribuït el títol de Mare de l’Església perquè engendrà el Crist, Cap de l’Església, i va esdevenir mare dels redimits abans que el Fill lliurés l’esperit. Sant Pau sisè, papa, va confirmar aquest títol en el discurs als Pares del Concili Vaticà segon tingut el dia 21 de novembre de 1964 i establí que “amb aquest suavíssim nom tot el poble cristià atorgui d’ara endavant encara més honor a la Mare de Déu”.

Del Comí de la Mare de Déu.

Ofici de lectures

HIMNE

O virgo mater, filia
tui beáta Fílii,
sublímis et humíllima
præ creatúris ómnibus.Divíni tui consílii
fixus ab ævo términus,
tu decus et fastígium
natúræ nostræ máximum:Quam sic prompsísti nóbilem,
ut summus eius cónditor
in ipsa per te fíeret
arte miránda cónditus.In útero virgíneo
amor revíxit ígneus,
cuius calóre gérminant
flores in terra cælici.Patri sit et Paráclito
tuóque Nato glória,
cuius vocáris múnere
mater beáta Ecclésiæ.
Oh Verge mare, dolçament
filla feliç del vostre Fill,
la més sublim i més humil
de les creades pel bon Déu.Des de la llunyana eternitat
sou un propòsit fix de Déu
sou el decor i el cim més alt
de la natura dels humans.Talment la vàreu ennoblir
que el seu altíssim Creador
per vós en ella es va encarnar
d’una manera sorprenent.En vostre claustre virginal
va rebrollar un amor ardent
i al seu escalf van germinant
flors a la terra per al cel.Glòria sigui al Pare etern
i al vostre Fill i a l’Esperit,
por un do seu podem cantar:
sou Mare de l’Església. Amén.

LECTURA SEGONA

Del discurs de sant Pau sisé, papa, en la clausura de la sessió tercera del Concili Vaticà segon.

(21 novembre 1964: AAS 56 [1964], 1015-1016)

Maria, Mare de l’Església

Per a la seva glòria i per a consol nostre, proclamem Maria Santíssima Mare de l’Església, és a dir, de tot el poble de Déu, tant dels fidels com dels pastors que l’anomenen Mare amorosíssima; i volem que des d’ara endavant, amb aquest nom tan dolç, la Verge sigui encara més honorada i invocada per tot el poble cristià.

Es tracta d’un títol, venerables germans, que no és pas nou de la pietat dels cristians; tot al contrari. Sobretot amb aquest nom de Mare, preferint-lo a qualsevol altre, plau als fidels, i a tota l’Església invocar Maria. Veritablement aquest títol pertany a l’autèntica substància de la devoció a Maria: troba la seva justificació en la dignitat mateixa de la Mare del Verb encarnat.

Així com la maternitat divina és el fonament de la relació personal especial de Maria amb Crist i de la seva presència en l’economia de la salvació obrada per Jesucrist, de la mateixa manera ella també constitueix el fonament principal de les relacions entre Maria i l’Església, ja que ella és Mare d’aquell que, immediatament a l’instant de l’encarnació en el seu si virginal, ha unit a ell, com a Cap, el seu Cos místic que és l’Església. Maria, doncs, com a mare de Crist, també és mare de tots els pastors i fidels, és a dir, de l’Església.

Per això, amb l’ànima plena de confiança i d’amor filial, alcem els ulls cap a ella malgrat la nostra indignitat i la nostra feblesa. Ella, que ens ha donat amb Jesús, la font de la gràcia, no deixarà de socórrer l’Església, ara que floreixent amb abundància dels dons de l’Esperit Sant s’afanya amb un nou vigor en la seva missió de salvació.

I la nostra confiança encara és més viva i més ferma, si considerem els lligams estretíssims que vinculen la nostra Mare del cel amb el llinatge humà. Malgrat tota la riquesa de les prerrogatives admirables amb què Déu l’ha dotada per a fer-la digna de ser la Mare del Verb encarnat, ella és ben pròxima a nosaltres. Filla d’Adam com nosaltres, i per tant germana nostra pels lligams de la naturalesa, és, no obstant, la criatura preservada del pecat original pels mèrits del Salvador, i als privilegis divinament obtinguts ajunta la virtut personal d’una fe total i exemplar, que la fa veritablement mereixedora de l’elogi evangèlic: Feliç tu, que has cregut.

Durant la seva vida terrena realitzà la figura perfecta del deixeble de Crist, mirall de totes les virtuts, i encarnà les benaurances evangèliques proclamades per Jesucrist. Per això, tota l’Església, en la seva incomparable varietat de vida i d’obra, en ella assoleix la forma més autèntica de la imitació perfecta de Crist.

RESPONSORI          Cf. Lc 1, 35

R. L’Esperit Sant vingué sobre Maria; * el poder de l’Altíssim la cobrí amb la seva ombra.

V. Associada a la passió del seu Fill, la va omplir per segona vegada com a Mare dels redimits; * el poder de l’Altíssim.

L’oració, com a Laudes.

Laudes

HIMNE

Quæ caritátis fúlgidum
es astrum, Virgo, súperis,
spei nobis mortálibus
fons vivax es et prófluus.Sic vales, celsa Dómina,
in Nati cor piíssimi,
ut qui fidénter póstulat,
per te secúrus ímpetret.Opem tua benígnitas
non solum fert poscéntibus,
sed et libénter sæpius
precántum vota prævenit.In te misericórdia,
in te magnificéntia;
tu bonitátis cúmulas
quicquid creáta póssident.Patri sit et Paráclito
tuóque Nato glória,
cuius vocáris múnere
mater beáta Ecclésiæ.
Verge que sou per als del cel
astre fulgent de caritat,
per a nosaltres sou la font
d’una esperança que no mor.Noble Senyora, valeu tant
al cor del Fill més piadós,
que el qui us demana confiat
per vós obté amb seguretat.Vostra clement benignitat
no sols ajuda els suplicants,
ans molt sovint liberalment
s’avança als precs dels bons fidels.Misericòrdia hi ha en vós,
magnificència també;
tota bondat que hi ha en el món,
en vós, oh Verge, acumuleu.Glòria sigui al Pare etern
i al vostre Fill i a l’Esperit,
por un do seu podem cantar:
sou Mare de l’Església. Amén.

Càntic de Zacaries, ant.:  Tots assistien unànimement a la pregària, amb Maria, la mare de Jesús.

Oració

Oh Déu, Pare misericordiós, el vostre Fill unigènit, clavat a la creu, va voler que la seva Mare, la Verge Maria fos també mare nostra; concediu a la vostra Església que, amb l’ajut amorós de Maria, sigui cada dia més fecunda, s’alegri de la santedat dels seus fills i atregui al seu si totes les famílies dels pobles. Per nostre Senyor Jesucrist.

Vespres

HIMNE

Virgo, mater Ecclésiæ,
ætérna porta glóriæ,
esto nobis refúgium
apud Patrem et Fílium.Gloriósa Dei mater,
cuius Natus est ac pater,
ora pro nobis ómnibus,
qui memóriam ágimus.Stella maris, lux refúlgens,
stirps regális, sancta parens,
roga Patrem et Fílium
ut det nobis Paráclitum.Virgo clemens, virgo pia,
virgo dulcis, o María,
exáudi preces ómnium
ad te pie clamántium.Funde preces tuo Nato,
crucifíxo, vulnerátom
pro nobis et flagelláto,
spinis puncto, felle potáto.Alma mater summi regis,
lux et porta celsi cæli,
inclína te mmisérrimis
geméntibus cum lácrimis.

Patri sit et Paráclito
tuóque Nato glória,
cuius vocáris múnere
mater beáta Ecclésiæ.

Verge, mare de l’Església,
porta eterna de la glòria,
sigueu refugi per a nosaltres
prop del Pare i del Fill.Gloriosa Mare de Déu,
de qui el Fill és també pare,
pregueu per tots nosaltres
que fem memòria vostra.Estel del mar, llum refulgent,
estirp reial, mare santa,
pregueu el Pare i el Fill
que ens doni el Paràclit.Verge clement verge piadosa,
verge dolça, oh Maria,
escolteu les pregàries de tots
els qui piadosament clamen a vós.Proferiu pregàries al vostre Fill,
crucificat, ferit, flagel·lat per
nosaltres, punxat amb espines,
abeurat amb fel.Santa mare del rei suprem,
llum i porta del cel excels,
inclineu-vos als més miserables
que gemeguem amb llàgrimes.

Glòria sigui al Pare etern
i al vostre Fill i a l’Esperit,
per un do seu podem cantar:
sou Mare de l’Església. Amén.

O bé: Ave, maris stella.

Ave maris Stella,
Dei Mater alma,
atque semper Virgo,
felix caeli Porta.Sumens illud «Ave»
Gabriélis ore,
funda nos in pace,
mutans Hevae nomenSolve vincla reis,
profer lumen caecis:
mala nostra pelle,
bona cuncta posce.Monstra te esse matrem:
sumat per te preces,
Qui pro nobis natus
tulit esse tuus.Virgo singuláris,
inter omnes mitis,
nos culpas solútos,
mites fac et castos.Vitam praesta puram,
iter para tutum:
ut vidéntes Iesum
semper collaetémur.

Sit laus Deo Patri,
summo Christo decus,
Spirítui Sancto,
tribus honor unus.
Amen.

De la mar estrella,
Mare de Déu santa,
i tothora Verge,
del cel porta, salve.Puix en rebre l’ave
que us donava l’àngel,
d’Eva el nom mudàveu,
pau vulgueu donar-nos.Reus, torneu-vos lliures;
cecs, la llum porteu-nos;
feu que el mal ens deixi,
i tot bé ens pervingui.Mare demostreu-vos;
nostres precs feu rebre
del qui, nat pels homes,
Fill volgué ser vostre.Verge entre les verges
i la més benigna,
deslliurats de culpa
feu-nos bons i castos.Vida deu-nos pura,
vers el cel guieu-nos;
que Jesús, amb joia,
puguem veure sempre.

Lloa a Déu, el Pare,
i al Crist honorança,
amb el sant Paràclit,
una als tres la glòria.
Amén

Càntic de Maria, ant.  El Senyor digué: Mare, aquí teniu el vostre fill. Després digué al deixeble: Aquí tens la teva mare.

L’oració, com a Laudes.

AL MARTIROLOGI ROMÀ

Cal afegir-lo entre els elogis per a les festes mòbils:

10bis. Dilluns després de Pentecosta

Momòria de la benaurada Verge Maria, Mare de l’Església, encomanada pel Crist als seus deixebles perquè, perseverant a la pregària, cooperin amb l’Esperit Sant en la proclamació de l’Evangeli.

Maria Birjina dohatsua Elizaren Amaren oroipenean
Erromatar Ohikuneko liturgi Liburuetan gehitu beharrekoak

ERROMAKO EGUTEGI OROKORREAN

EKAINA

Pentekoste ondorengo astelehenean
Maria Birjina dohatsua Elizaren Ama          Oroipena

ERROMAKO MEZA LIBURUAN

Pentekoste ondorengo astelehenean

Maria Birjina dohatsua Elizaren Ama

Oroipena

Maria dohatsua Elizaren Amaren Meza erabiliko da (1223. or.).

MEZAKO IRAKURGAIAK LIBURUAN

Pentekoste ondorengo astelehenean
Maria Birjina dohatsua Elizaren Ama

I. IRAKURGAIA

Has 3, 9-15.20: *Bizudun guztien Ama+
[Adamek zuhaitzetik jan ondoren,] Jainko Juanak dei egin eta esan zion…

Edota:

Eg 1, 12-14: *Jesusem ama Mariarekin otoitzari emanak bizi ziren+
[Jesus zerura igo ondoren,] apostoluak Jerusalemera itzuli ziren…

ERANTZUN SAL.

Sal 87 [86], 1-2. 3 eta 5. 6-7
R/. (ik. 3): Ospetsuki mintzo dira zutaz, Jainkoaren hiria!

ALELUIA

Zorionekoa zu, Maria Birjina, Jainkoaren Ama,
dohatsua zu, Elizaren Ama,
zure Seme Jesu Kristoren Espirituaren sua
gugan pizten duzuna!

EBANJELIOA

Jn 19, 25-34: *Horra hor zeure semea! Horra hor zeure ama!+
Aldi hartan, Jesusen gurutzearen ondoan zeuden… eta ura atera ziren.

ORDUETAKO LITURGIAN

Pentekoste ondorengo astelehenean

MARIA BIRJINA DOHATSUA ELIZAREN AMA

Oroipena

Elizaren Buru den Kristo sortu zuenetik eta bere Semeak gurutzean ezken arnasa eman baino lehen berrerosien Ama izan zenetik, emana izan zaio Maria Birjina dohatsuari Elizaren Ama titulua. Paulo Seigarrena Aita Santu dohatsuak era ospetsuan berretsi zuen deitura hori, Vatikanoko Bigarren Kontzilioko Gurasoei, 1964ko azaroaren 21ean, eginiko mintzaldian, eta erabaki zuen, *une honetatik kristau-herri osoak gorets eta dei dezala Jainkoaren Ama izen guztiz gozo henekin+.

Maria Birjina dohatsuaren Betikotik, ondorengo hauek izan ezik.

Irakurgaien Ordua

GORAZARREA

1
Ama zara ta Birjina
Jesusen ama Maria;
agur zuri, agur t=erdi,
sortzetik garbi-garbia.2
Egilearen alaba,
ama zaitu Egileak;
zure sabela izan du
sorleku Jainko Semeak.3
Espiritu Santuaren
egitez sortu zenduan:
geroztik dago gurekin
Jainko Semea munduan.
4
Jesus sortzean, harekin
gu ere sortu gintuzun;
ama zaitugu, Jesusek
gurutzetik esan zigun.5
Zaitzagun mundu beltzean
gure begientzat izar;
zaitzagun mundu gaiztoan
gure biotzentzat indar.6
Aintza Jaungoiko Aitari,
aintza Seme Jainkoari,
aintza, biokin batean,
Espiritu Santuari. Amen.

BIGARREN IRAKURGAIA

Paulo Seigarrena Aita Santu dohatsuak Vatikanoko Bigarren Kontzilioko hirugarren batzarraldiaren bukaeran eginiko mintzalditik.

(1964ko azaroaren 21ean: AAS 56 [1964], 1015-1016)

Maria Elizaren Ama

Mariaren eta Elizaren arteko erlazio estuak aintzat harturik, Maria Birjinaren aintzarako eta gure pozerako, Maria guztiz Santua Elizaren Ama deklaratzen dugu, hau da, kristau-herri osoaren Ama, Ama guztiz maitea deitzen dioten fededunena nahiz artzainena, eta, erabakitzen dugu, une honetatik kristau-herri osoak gorest esta dei dezala Jainkoaren Ama izen guztiz gozo honekin.

Titulo hau ez da gauza berria, senide agurgarriok, kristau-debozioarentzat, bestela baizik; kristauek eta Eliza osoak nahi izan dute Mariari Ama izanez dei egitea. Egiaz, izen hau Mariarenganeko debozioaren benetako izaeren barruan sartzen da, Jainkoaren Hitz gizon eginaren Ama den aldetik, Mariari aitortzen zaion duintasunean bertan irmoki oinarriturik.

Jainkoaren Ama izateak, Maria Kristorekin erlazio berezia izatera eta Jesu Kristok burutukako giza salbamenean presente egotera daramanez, halaxe, Jainkoaren Ama izatetik datoz Mariaren eta Elizaren arteko erlazioak ere; izan ere, Maria Kristoren Ama da eta, Kristok, haren sabel garbian giza izatea hartu zuen lehen-unitik, bere Gozputz mistikoa, hau da, Eliza berekin alkartu zuen, honen Buru denez. Beraz, Maria, Kristoren Ama denez gero, fededunen eta artzainen Amatzat, hau da, Elizaren Amatzat ere hartu bahar da.

Horregatik, guk, ezerezak eta ahulak izan arren, gure begi gartsuak harengana jasotzen ditugu seme-alaben maitasunez. Hark, naturaz gaindiko graziaren iturri den Jesus eman ziguneta, ez dio ukatuko Elizari bere ama-laguntza, batez ere Kristoren Emaztea bere salbamenegitekoa betetzen eginahalean saiatzen den garai honetan.

Zeruko gure Ama honen eta gizadiaren artean ezartzen diren lotura estu-estuek, geure konfiantza oraindik gehiago piztera eta sendotzera garamatza. Jainkoak dohain guxtix handi eta zoragarriez jantzi badu ere gizon egindako Hitzaren Ama egiteko, hala ere Maria guregandik hurbil dago. Hura ere, gu bezala, Adamen alaba eta, hortaz gure senidea, gure giza izaera berekoa da; egia da, jatorrizko bekatutik garbi gordea izan zela Kristoren geroko merezimenduengatik, baina Jainkoagandik hartutako dohainei bere fede bedingabearen etsenplua gahitzen die, Evangelioan datorren gorespena merezi izanez: *Zorionekoa zu, sinetsi duzulako+.

Bizitza galkor honeran Kristoren ikaslearen irudi bete-betekoa izan zen; bertute guztien ispilua izan zen eta oso-osoan bete zituen Kristok predikatutako zoriontasunak. Horregatik, Eliza osoak, bere askotariko biziera eta bere ekintza garatzean, Birjina Jainkoaren Amaren eredu ezin hobea du Kristo bete-betean imitatzeko.

GALDERANTZUNA          Ik Lk 1,35

R/. Espiritu Santua jaitsi zen mariarengana: * eta Goi-goikoarfen indarrak bere itzalpean hartu zuen.

V/. Bere Semearen nekaldian lagun izan zena bate egin zuen berriro berrerosien Ama izateko. * Eta goi-goikoaren.

Otoitza, Gorespenetakoa.

Gorespenak

GORAZARREA

1
Agur, Ama, errukiz betea,
Jainjoaren grazizko lorea,
itxaropen ustelik gabea,
Ama pozez Jainkoak esea, zu Maria!2
Gizadian haurrik ederrena,
neskatxetan agurgarriena,
birkinetan garbiz garbiena,
ta gorago zeruan zaudena, zu Maria!
3
Egin zaitu Jaunak miragarri;
hautu zaitu mirabetzat, Mari,
aukeratu andre zoragarri,
zeruko ta lurreko mirari, zu Maria!4
Nahi zaitugu dohatsu aitortu,
eginahalez ezin dugu lortu,
esan, jardun, hitzetan agortu,
zu goratzen geldi gara mutu, oi Maria!

5
Zakigu, Ama, bizian atsegin,
gauden beti pozetan zurekin,
atzerritik irtetearekin
bil zeruan gu aingeruekin, oi Maria!

Benedictus ant. Ikasleak, Jesusen ama Mariarekin, bihotz batez otoitzari emanak bizi ziren.

Otoitza

Oi Jainko, Aita errukitsua, zure Semeak, gurutzean josia zegoela, bere Ama Maria Birjina dohatsua gure Ama ere egin zuen; egizu, haren maitasunarn leguntzaz, zure Eliza, gero eta emankorragoa izanik, poztu dadila bere seme-alaben santutasunaz eta erakar ditzala bere altzora mundu zabaleko herrialde guztiak. Zure Seme Jesu Kristo gure Jaunaren bitartez, Zurekin eta Espiritu Santuarekin batean Jainko eta errege bizi baita gizaldi eta gizaldietan.

Bezperak

1
Agur, Jainkoaren
Ama maite ederra
zeruko atea,
itsasoko izarra.2
Gabrielen ahoz
*Ave+ pozgarria;
geroztik zaitugu
zu *Eva+ berria.3
Evaren izena
aldatua duzu,
eta Jaunarekin
baketu gaituzu.4
Bekatu kateak
hautsi, arren, guri,
gaitzak kendu eta
grazia isuri.
5
Erakuts ezazu
ama zaitugula;
Semeak zugatik
entzun dezaigula.6
Birjina ta ama
denen gain eztia;
emaguzu bihotz
apal ta garbia.7
Jesus bedi gure
bide ta bizia,
azken poza dadin
hura ikustea.8
Aintza Aitari ta
aintza Semeari,
aintza bera bien
Espirituari. Amen.

Magníficat, ant. Jesusek esan zion bere amari: *Emakume, horra hoz zeure Semea!+ Gero, ikasleari esan zion: *Horra hor zeure ama!+

Otoitza, Gorespenetakoa.

ERROMAKO MARTIROLOGIOAN

Mugikorrak diren ospakizunetan gehituko da:

10 bis. Pentekoste Igandearen ondorengo astelehena

Maria Birjina dohatsua Elizaren Amaren oroipena, berarekin Espiritu Santuari bihotz batez etengabe otoitz eskatu baitzien Kristok bere ikasleei Ebanjelioa iragartzeko.

 

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s